Descripción
del tipo Top Brunching
Hortalizas como la remolacha ofrecen como ventaja en huertos urbanos el obtener una mayor producción con pocas plantas. Y ambas se recomiendan sembrar durante el otoño.
La remolacha puede sembrarse todo el año pero las épocas más adecuadas son el otoño y la primavera.
Es de clima templado, con una temperatura óptima de 14º a 22ºC. Igual que otros cultivos de raíces, las remolachas necesitan un suelo fértil (especialmente alto en potasio), sueltos y de buen drenaje, para su crecimiento vigoroso. Tolera salinidad y algo de acidez. Conviene aplicar materia orgánica antes de la preparación del terreno.
Debe evitarse las siembras durante los meses más calurosos. La siembra en invierno puede hacerse con semilla especialmente cuando se utiliza semilla nacional. Las épocas más adecuadas son la primavera y el otoño. La semilla de remolacha es realmente un racimo (grupo) de semillas en una fruta seca. Varias plantas pueden crecer de cada fruta.
Se siembra en forma directa a chorrillo (con raleo), en hileras separadas en surcos de 2 cm de profundidad. Antes de sembrar es recomendable remojar las semillas uno o dos días en agua.
Las variedades más pequeñas de remolacha necesitan entre 8 y 12 semanas para madurar y las variedades más normales entre 14 y 16. Cuando crecen en medios secos, se vuelven duras y dan flores prematuras. Al momento que empiezan a crecer las primeras hojas, se debe retirar de la tierra una planta por medio para dejar espacio de crecimiento a las que queden. Cuando están un poco más grande se dejan plantas a 8 cm de separación si se quieren remolachas pequeñas, y a 25 cm si se prefieren grandes. Puede ser cosechada a los 60 o 20 días después de su siembra. Se recomienda plantar en maceteros de al menos 4 litros a una profundidad mínima de 25 centímetros, y entre una planta y otra de 8 cm a 25 cm.