Descripción
Es un cultivo habitual en el huerto de primavera y verano, y a pesar de que a veces pueda resultar complejo su cultivo, resulta de los más gratificantes y productivos cuando hacemos las cosas bien. Atentos a estos trucos para disfrutar de la mejor cosecha de pepinos!
1. Prepara bien el suelo
Para plantar pepinos necesitas un suelo con un buen drenaje y un pH entre 5,5 y 6,8. Por tanto un buen sustrato es indispensable. También es esencial aplicar una buena dosis de abono, humus de lombriz o un buen compost en el suelo, mesa de cultivo o maceta donde los vayas a cultivar, ya que son my exigentes en nutrientes.
2. Siembra en el momento justo
Las semillas de pepino no germinan hasta que la temperatura del suelo alcance unos 15 o 16 grados centígrados. Generalmente los pepinos se cultivan en primavera, pero si vives en una zona donde el clima es más fresco te aconsejamos que esperes un poco hasta que el frío amaine o los siembres en semillero en interior hasta que la temperatura del suelo suba unos grados.
CONSEJO EXTRA: Haz una segunda siembra después de 4 o 5 semanas después de la primera. De esta manera tendrás pepinos durante toda la temporada. ¿A qué es genial?
3. Asegura la polinización
Los pepinos, cómo el resto de cucurbitáceas, tienen flores macho y hembras, requiriendo estas últimas ser polinizadas para garantizar la producción de frutos.
¿Qué se puede hacer para garantizar la polinización de las flores hembra?
Planta mínimo dos o tres plantas de la misma variedad. De esta forma tendrás más posibilidades de que las flores macho y hembra coincidan en el tiempo.
Atrae a las abejas y a los abejorros, no nos cansaremos de hablar nunca de las virtudes de estos incansables polinizadores. Plantar flores que les atraigan y evitar el uso de pesticidas son algunas de las cosas que se pueden hacer para atraer a abejas y abejorros.
Poliniza a mano: Con un pincel puedes recoger el polen de las flores macho y espolvorearlo sobre la flor hembra (la distinguirás por la presencia de un “minipepino” en su base). Es un trabajo laborioso, pero a veces resulta imprescindible para obtener una buena cosecha.
Utiliza fertilizantes ricos en Potasio: Ya que favorecen la producción de flores y así, tendrás más probabilidades de polinización. De paso, los fertilizantes ricos en potasio te aportarán mayores cosechas y frutos de mejor calidad. Lo puedes leer en el post: trucos para mejorar el sabor de tus cultivos.
4. Utiliza un túnel de protección
Estos invernaderos de acordeón con arcos metálicos resultan practiquísimos, ya que son lo suficientemente espaciosos para dar cobijo a las matas de pepino, y mantendrá la temperatura en su interior en las primeras semanas de primavera.
Cuando empiecen a salir las primera flores será la hora de quitar el túnel de protección y guardarlo hasta la próxima temporada. De esta forma no impediremos la polinización de las flores.
5. Evita encharcar el suelo
A los pepinos no les gustan los suelos encharcados por diferentes motivos. Uno de ellos es la fácil aparición y propagación de plagas como el oídio y el mildiu.
6. Protégelos del calor excesivo
¿Demasiado calor veraniego? A los pepinos les gusta el calor, pero las temperaturas demasiado altas provocarán que salgan más flores macho que hembras, provocando una disminución de la producción. Si los veranos son muy calurosos en tu zona, colócalos allá donde tengan cierta sombra en las horas de más calor. Utiliza una sombrilla o simplemente, cúbrelos con una sábana blanca que refleje la luz del sol durante un par de horas al día.
7. Utiliza acolchado
Favorecerás que el agua no se evapore reduciendo las necesidades de riego, mantendrás el suelo a una temperatura estable, evitando enfriamientos y sobrecalentamientos (tal y como les gusta a los pepinos) y lo más importante, evitarás que los frutos se pudran, hecho que ocurre cuando están en contacto directo en el suelo.
acolchado
Acolchado de plástico negro, ideal para temporadas frías ya que absorbe mejor la radicación solar y retiene el agua.
8. Utiliza la rotación de cultivos.
Evita plantar pepinos en lugares donde ya lo has hecho anteriormente. Son plantas muy voraces en nutrientes y agotarías los recursos del suelo al cabo de unas temporadas. Además, plantar un mismo cultivo año tras año en el mismo lugar da pie a que las plagas sufridas un año se reproduzcan al siguiente. Busca un sitio nuevo para los pepinos y deja el espacio del año anterior a cultivos de hojas verdes (lechugas, acelgas, escarolas), leguminosas (judías y guisantes que volverán a aportar Nitrógeno al suelo) o cultivos de raíz (ajos, cebollas, rábanos).
9. Plantar pepinos en vertical.
Si dispones de un espacio reducido o simplemente quieres tener pepinos en una maceta no vas a tener ningún problema. Para plantar pepinos en macetas es necesario un volumen de 20 litros mínimo, como esta maceta grande. La planta del pepino es muy expansiva, ocupa mucho espacio, pero cultivando en vertical esto deja de ser un problema para convertirse en una ventaja. Haciendo uso de mallas, tutores y celosías conseguiremos que ocupen menos espacio y además los pepinos estarán mejor ventilados por lo que serán menos susceptibles a ser atacados por hongos como el oídio y el mildiu. Por otro lado, la recolección del pepino será mucho más cómoda. Y podemos aprovechar la sombra que generan para cultivar aquellas variedades que sufren más con el sol de verano y que disfrutan con cierta sombra, cómo las lechugas o la rúcula.
10. Cosecha los pepinos cuando todavía son jóvenes
Es mejor cosecharlos antes de que se hagan muy grandes, su sabor es mejor. Además, de este modo se incita a la planta a generar nuevos frutos, y tendrás pepinos durante más tiempo.
video orientativo -españa- recordar que estamos en el Hemisferio sur
https://youtu.be/zb96Bag77eA
pepinos en casa
https://youtu.be/6f0yhnY-Fzk